ALIMENTOS OBLIGATORIOS

La dieta de un pequeño deber ser rica y variada para asegurar que reciba todos los nutrientes que requiere durante su crecimiento. Sin embargo, los nutriólogos especializados en pediatría han identificado ciertos alimentos que no deben faltar por ningún motivo en la dieta de un pequeño ya que contienen sustancias que además de aportar vitaminas, proteínas y minerales ofrecen una protección natural contra las enfermedades a lo largo de toda la vida. Entre estos figuran:

Manzanas: fuente importante de fibra soluble que previene las enfermedades cardiacas. Ayudan a disminuir el índice de grasa y calorías. Otra buena fuente de fibra soluble es la avena.

Mantequilla de cacahuate: Fuente de grasa mono saturada que protege al corazón porque disminuye los niveles de colesterol “malo” en la sangre e incrementa los niveles de colesterol “bueno”.

Brócoli: contiene anticancerígenos llamados flavonoides. Proporciona betacarotenos y vitamina C, sustancias antioxidantes que pueden prevenir cierto tipo de enfermedades cancerosas.

Germen de trigo: contiene cantidades considerables de vitamina E, ácido fólico y zinc. La vitamina E es también un antioxidante que interviene en la salud del corazón y en el fortalecimiento del sistema inmunológico. El ácido fólico contribuye a la formación de células sanguíneas y el zinc, interviene en el crecimiento.

Yogurt: Excelente fuente de calcio, necesario para construir huesos sanos y prevenir la osteoporosis, enfermedad que debilita los huesos y los hace quebradizos. Además, los cultivos del yogurt ayudan a fabricar anticuerpos en contra de algunas infecciones virales que atacan al estómago e intestino y ayudan a reestablecer la flora intestinal después de la toma de antibióticos o de enfermedades diarreicas.