HISTORIA DEL AÑO NUEVO…

En sus inicios, el Año Nuevo se conmemoraba en el mes de marzo y gracias al emperador Julio Cesar, el primer día del año pasó a ser el 1 de enero de cada año.

El emperador Julio Cesar tendría sus razones fundamentales sobre dicha decisión, pero se dice que, en la antigua Roma, era en el undécimo mes (enero), cuando los cónsules asumían el nuevo gobierno. Por esta razón enero era el mes dedicado a dios Jano, el patriarca de las entradas y los nuevos comienzos.

Hoy en día, la llegada del Año Nuevo sigue teniendo para nosotros el mismo significado que en su momento tenía para los romanos en el año 47 a.C. un nuevo inicio para reescribir nuestro destino.

Según la cultura, costumbres y tradiciones, en cada país, la celebración del año nuevo tiene varias temáticas, ya que se basan en sus tradiciones ceremoniales, pero siempre con un único fin, que es iniciar un nuevo año con los mejores deseos, bendiciones, expectativas por cumplir, pero sobre todo…. con prosperidad.