RELOJES DE MÉXICO

Cabe mencionar que muchos están sin actividad debido a que las piezas para repararlos son difíciles de conseguir o se están elaborando, ya que por su antigüedad no se fabrican en la actualidad. Según los encargados en darles servicios, estiman que existen piezas de estos tesoros históricos que llegan a costar unas sumas bastante elevadas y alcanzan hasta un peso de media tonelada.

El reloj de la Catedral Metropolitana avanza cada dos minutos, dado que sus manecillas son de metal y pesan aproximadamente 60 kilogramos. En la cúpula del lado poniente de donde se encuentra la campana mayor de la Catedral, está el reloj que data del año 1905 y que es el que ahora indica la hora a todos los capitalinos desde la Plaza de la Constitución.

El Reloj Chino, es el único de los 23 del primer cuadro del a ciudad que es electrónico, aunque su origen fue mecánico. El obsequio de la colonia China se realizó el 1910 con motivo de la conmemoración del centenario de la Independencia.

Este monumento fue dañado durante la “La Decena Trágica” y hubo de repararlo a conciencia, y fue hasta 1921 cuando nuevamente se hizo funcional. En sus cuatro carátulas que lo componen tiene diferente tipo de números que indican la hora.

Estos son sólo algunos de los monumentos históricos de la Ciudad de México que pasan desapercibidos por el citadino, que pocas veces se detiene a conocer y admirar el ambiente que lo rodea.

Desde que el hombre empezó a dividir los días en periodos más cortos y creó para ello aparatos que le pudieran indicar el tiempo, la mayoría de las veces procuró que dichos aparatos, aparte de servir para el uso al que estaban destinados, fueran al mismo tiempo obras de arte para que de esta forma, siendo admirados, cumplieran dos propósitos: el práctico y el artístico.

La mayoría de los relojes monumentales que tiene la Ciudad de México son de origen alemán y francés; hay públicos y particulares, en su mayoría están en los templos católicos.

El más antiguo entre los 23 relojes que existen en el centro histórico es el de “Regina” cuyo modelo es francés y se encuentra ubicada precisamente en el templo de Regina.  Actualmente está funcionando, luego de una costosa reparación que se inició desde 1989.