PARA EMPEZAR UN BUEN DÍA

el hecho de que al despertar llevamos muchas horas de ayuno, por lo que el organismo no cuenta con nutrientes suficientes para realizar adecuadamente las actividades a las que está acostumbrado. Al no tener la energía necesaria, el organismo sufre cambios metabólicos que afectan de manera temporal el funcionamiento corporal.

Esto se aplica de manera muy directa al valor que tiene el desayuno completo para los niños, ya que existen numerosas investigaciones que reafirman la teoría que la primera comida del día es imprescindible para el desarrollo integral del ser humano. Quizás el resultado más alarmante de dichos estudios es que saltarse el desayuno afecta negativamente la capacidad mental y contribuye a la aparición de problemas de aprendizaje.

También se ha comprobado que un desayuno completo, a base de cereal, leche y fruta, puede ser la medicina perfecta para los niños que presentan problemas de irritabilidad y apatía, ya que la falta de una buena alimentación matinal causa fatiga, pérdida de energía y dificultad para realizar las tareas intelectuales y físicas y, aunque parezca difícil de creer, puede conducir a una baja autoestima.

Siempre hay que tener en mente que no podemos esperar que nuestros hijos se alimentan bien si ven que sus padres no lo hacen. Debemos empezar el día con una nutrición adecuada, confiados en que lo que bien empieza para nuestros hijos… bien acaba.